¿Cómo elegir una idea de negocio?
Por: Maru Caballero, Bolsillo y Sencillo
¿Tienes esa semillita de querer emprender, pero no sabes en qué? Elegir una idea de negocio puede ser emocionante porque nos abre a la posibilidad de crear algo propio, pero también puede ser retador tener que decidir qué concepto desarrollar. Por ende, este es un proceso que combina autoconocimiento y análisis de oportunidades.
Acá te contamos qué tener en cuenta a la hora de elegir tu idea de negocio.
Autoconocimiento
¿Qué te gusta, en qué tienes experiencia y para qué tienes habilidad? Emprender requiere tiempo, esfuerzo y dedicación. Por ello, elegir una idea de negocio acorde a lo que te gusta y sabes hacer, será clave para mantener la motivación incluso cuando enfrentes obstáculos.
Para comenzar con una lluvia de ideas, toma una hoja y divídela en tres partes: ‘Inventario de pasiones’, ‘Inventario de habilidades’ e ‘Inventario de experiencias’.
En la primera columna, coloca todas tus pasiones, es decir, aquellas actividades que disfrutas hacer, en las que se te va el tiempo sin darte cuenta e inclusive harías de manera gratuita de tanto que te gusta hacerlo. Piensa en aquello que haces en tu tiempo libre.
En la segunda columna, coloca todas aquellas actividades en las que tienes destreza ya sea en el ámbito personal o profesional. Por ejemplo, conocimientos específicos en programación, diseño gráfico, marketing digital, planificación, comunicación efectiva o negociación son algunos ejemplos de habilidades a considerar.
Y, por último, en la tercera columna coloca todas aquellas áreas, sectores o industrias en las que tienes una ventaja competitiva, en las que has trabajado, tienes contactos o recursos que podrías aprovechar para emprender.
Una vez tengas este inventario listo, comienza a realizar una lluvia de ideas de posibles negocios a desarrollar y que estén alineadas a tus pasiones, habilidades y, preferiblemente, tu experiencia.
Selecciona la idea de negocio
Luego de la lluvia de ideas, viene el momento de selección. Usa estos criterios para elegir la mejor opción:
- Afinidad personal: la idea debe emocionarte, estar alineada a tus pasiones, habilidades y experiencia para que te motive a largo plazo. Esta debe ser la mayor prioridad.
- Demanda de mercado: asegúrate de que existe un mercado dispuesto a pagar por la solución que brinda esa idea de negocio.
- Diferenciación: ¿Es algo que ya existe? ¿Tiene alguna ventaja competitiva? ¿Es algo innovador?
- Rentabilidad: el modelo de negocio que propones, ¿puede generar ingresos de manera sostenible? ¿Qué recursos necesitas para comenzar?
Aterriza la idea
Una vez elegida la idea de negocios, es hora de darle forma. Para aterrizarla, pregúntate: ¿qué problema resuelve tu idea de negocios? Y al hablar de problema, me refiero a la necesidad emocional. Las personas no compran productos o servicios, sino soluciones a problemas o necesidades emocionales.
Por ejemplo, si tu idea es vender agendas personalizadas, no solo estás vendiendo un producto, sino la solución para la desorganización y la falta de productividad. Las personas no quieren la agenda en sí, lo que buscan es la herramienta que les ayudará a sentirse en control de su tiempo y encaminados a alcanzar sus objetivos. Este es el tipo de problema que debes identificar al momento de aterrizar tu idea porque te ayudará a conectar con tu cliente ideal y, eventualmente, a generar ventas.
Conocer tus fortalezas, validar la demanda de mercado y entender la necesidad emocional de tus clientes te ayudará a elegir una idea de negocio con mayor potencial de éxito.
