Viviendo un eslogan por 20 años
“Aún como país nos falta mucho por mejorar en educación, salud y nutrición, pero hoy la sociedad está más consciente de que estos problemas existen y que tenemos que afrontarlos”, Vicky de Cordero, Directora de la Fundación Sus Buenos Vecinos.
Si le preguntamos a alguien en la calle si conoce a la Fundación Sus Buenos Vecinos seguramente la asociará inmediatamente con Banco General. Y es que el eslogan utilizado por el Banco desde hace más de 40 años fue el perfecto para nombrar a su fundación, ya que refleja la filosofía de esta organización: dar una mano al más vulnerable, apoyar al necesitado, abrir oportunidades para los que no las tienen y trabajar arduamente para mejorar la calidad de vida de miles de personas.
Para conocer a fondo qué hace la Fundación Sus Buenos Vecinos y cuál es su filosofía entrevistamos a la Sra. Vicky de Cordero, Directora Ejecutiva de la misma.
¿Por qué y cómo nació la Fundación Sus Buenos Vecinos?
En 1996, cuando Banco General trasladó la sede de su Casa Matriz a un nuevo e imponente edificio, la junta directiva, liderada por el Sr. Federico Humbert, decidió unir este acontecimiento al establecimiento de la Fundación Sus Buenos Vecinos, para dar permanencia a la labor social que venía desarrollando el Banco desde hacía muchos años. En el acto de inauguración de la Casa Matriz, el Sr. Humbert anunció públicamente la creación de la Fundación e hizo entrega del capital semilla de medio millón de dólares.
¿Cómo fueron esos primeros años al iniciar una Fundación?

El personal de la Fundación Sus Buenos Vecinos visita los proyectos y las asociaciones con regularidad.
Los primeros años fueron de organización, de consolidar toda la información que los diferentes gerentes tenían sobre proyectos a los que aportaba el Banco. Se definieron las áreas de atención. Empezamos el proceso de conocer a las ONG más de cerca y visitar los proyectos.
También fueron años en que dimos a conocer la Fundación Sus Buenos Vecinos internamente y se trabajaron los procesos para que los colaboradores guiaran a las asociaciones y personas que se acercaban a las sucursales y oficinas de Banco General, para que presentaran sus peticiones o solicitudes a la Fundación.
De la mano de las ONG recorrimos el país y entendimos las necesidades y carencias de la población menos favorecida, fuimos comprendiendo que la caridad se debía reforzar con conocimiento para el beneficiario final. Comprendimos que dar pescado es insostenible, que hay que enseñar a pescar para romper el círculo de la pobreza.
A los cinco años de estar operando, aún percibíamos que era necesario involucrar más personalmente a todos los colaboradores del Banco, para que se identificaran con la Fundación Sus Buenos Vecinos. En el 2001, al ser escogido Banco General como la primera empresa firmante del Pacto Global en Panamá surgió la iniciativa de formar un voluntariado corporativo que, en sinergia con la Fundación, lograra mayor impacto y así nació Vecinos en Acción.
Desde entonces, los Vecinos en Acción son incansables voluntarios de diversas ONG que son beneficiarias de la Fundación Sus Buenos Vecinos y las han apoyado para su crecimiento y fortalecimiento.
¿Cómo ha evolucionado o cambiado la Fundación a través de los años?

La escuela San Pedro Nolasco, ubicada en Burunga, Arraiján, es uno de los proyectos insignia de la Fundación Sus Buenos Vecinos.
La Fundación se ha vuelto cada vez más proactiva. En estos años hemos aprendido mucho de las ONG con las que tenemos proyectos, de las asociaciones a las que les aportamos. Hemos visto que con persistencia, seriedad y amor al prójimo se pueden llevar a cabo proyectos que parecen imposibles.
La profesionalización de las ONG ha sido para nosotros siempre un tema importante y por ello las hemos apoyado en mejorar su administración a través del patrocinio de diplomados. Así, participamos con USAD, Voluntarios de Panamá y Fondo Unido de Panamá en desarrollar y mantener una plataforma para las ONG, la cual es www.ponteenalgo.com. En este mismo camino, en alianza con Softnet y Fondo Unido se desarrolló Big Hearts, un software gratuito para administrar ONG.
La Fundación Sus Buenos Vecinos ha crecido no solo en número de colaboradores, sino que nos hemos convertido en un equipo que busca siempre poder impactar más eficazmente al beneficiario final, que es un niño o un adulto mayor que requiere de nuestra ayuda a tiempo, porque el hambre no se puede mitigar mañana, o la salud no se puede atender el otro año.
Nuestra evolución nos ha llevado a manejar programas propios tales como la Beca a la Excelencia Sus Buenos Vecinos y la Beca Mi Buen Vecino. Entre ambos programas estamos atendiendo a 238 estudiantes que cursan estudios secundarios en colegios privados de reconocida trayectoria. Estos programas requieren de rigurosos métodos de selección y de un seguimiento cercano a cada becado.

En el 2016 se graduaron de secundaria los primeros 46 estudiantes que ingresaron al programa Becas Sus Buenos Vecinos la Excelencia. Todos están ya iniciando su carrera universitaria.
Hoy en día, participamos de manera activa en proyectos como la Escuela San Pedro Nolasco que en conjunto con Religiosos Mercedarios, Pro Niñez y la Fundación Federico Humbert estamos desarrollando. Esta es una escuela modelo en Burunga, Arraiján, que da servicios comunitarios de estimulación temprana y que atiende a niños desde prematernal hasta 4to. grado. Se proyecta que esta escuela crezca un grado por año hasta el duodécimo grado.
¿Qué no ha cambiado a través de los años?
La esencia de la Fundación no ha cambiado y es que lo más importante es el prójimo. Que lo que hacemos, sea poco o mucho, es con convicción y porque nace de lo más profundo de nuestro corazón. Que los valores éticos prevalecen ante todo y no son negociables.
No ha cambiado la filosofía que nuestro presidente Federico Humbert le ha impreso a la Fundación y que se resume en este pensamiento anónimo el cual con frecuencia nos recuerda: “Bienaventurados los que saben dar sin recordarlo y recibir sin olvidarlo».
¿Qué retos se les han presentado durante el camino?
Un reto que se nos presentó en el 2005 fue que Banco General decidió que la celebración de su 50 aniversario debía ser un proyecto social de gran impacto que ejecutara la Fundación Sus Buenos Vecinos. De ahí nace Su Voto hace la Diferencia, que es una votación en la que participan todos los clientes de Banco General para escoger a las ONG y asociaciones de su preferencia para que se les otorgue una donación extraordinaria. La respuesta de los clientes y de las asociaciones fue inesperada. Las asociaciones empezaron a hacer campaña y los clientes se entusiasmaron votando.

Su Voto Hace la Diferencia es un proyecto en el que los clientes de Banco General votan por sus ONG preferidas para que reciban una donación extraordinaria.
Se donó $300,000, pero pensamos que la mayor ganancia fue que muchas asociaciones dieron a conocer la gran labor que calladamente hacen cada día. Su Voto hace la Diferencia se ha repetido tres veces más.
¿Qué cambios sociales positivos ha visto en estos 20 años?
Hay muchísimos cambios positivos y sería imposible mencionarlos todos: hemos visto comunidades transformarse, como es el caso de Cañazas, en donde hemos participado con Pro Niñez y Nutre Hogar en proyectos que han impactado a esta área y sus habitantes.
- El trabajo comunitario que hace Nutre Hogar en la comarca, para evitar la desnutrición. La evolución de esta organización de incursionar en las áreas más pobres, con el fin de enseñarles a cultivar hábitos de higiene, llevarles la Galleta Nutritiva y así atacar el problema de raíz para evitar que más niños lleguen a los centros de recuperación.
- Jóvenes que hace 6 años entraron al programa de becas de escuelas primarias oficiales, que provienen de áreas difíciles, que se han graduado con honores de colegios privados de reconocida trayectoria y que están ingresando a las universidades locales o que se han ganado becas para cursar su universidad en Estados Unidos.
- Ver el cambio que ha hecho Olimpiadas Especiales, que de unos pocos atletas con los que inició se ha convertido en una organización que tiene miles de atletas a nivel nacional y que creció de la mano de los Vecinos en Acción y de la Fundación; que se engrandeció y voló alto, tanto que este año es Panamá la sede de los Juegos Latinoamericanos.
- En el área de inclusión hay muchos avances; si bien es cierto que aún tenemos camino por recorrer, la aceptación y la integración de las personas con discapacidad es una realidad. Tenemos compañeros colaboradores que se destacan en sus labores y que hace 20 años no hubiesen tenido esa opción.
- Recibir la noticia de que Panamá ha logrado grandes avances en combatir el trabajo infantil, gracias a los programas y empeño de Casa Esperanza, es otro importante cambio social del que hemos sido testigos.
- La solidaridad de la sociedad para respaldar campañas sociales como #YoLucho que lleva un mensaje de apoyo a los pacientes de cáncer y sus familiares, donde miles de personas se suman para crear conciencia de la necesidad de hacerse los exámenes a tiempo.
- Vemos que hay mucha más sinergia entre asociaciones, que han empezado a trabajar algunos proyectos mancomunadamente. En este tema hay mucho por hacer, pero estamos en ese camino y vamos entendiendo que es determinante para ser más eficaces y eficientes.
Aún como país nos falta mucho por mejorar en educación, salud y nutrición, pero hoy la sociedad está más consciente de que estos problemas existen y que tenemos que afrontarlos. Estas son tareas impostergables y todo lo que hagamos para solucionarlas es ganancia para todos. Hay mucha gente trabajando para darle una oportunidad a los menos favorecidos, muchas almas buenas que día a día dan lo mejor de sí por el prójimo.
No nos queda más que dar gracias al equipo de la Fundación Sus Buenos Vecinos y felicitarlos por sus 20 años de labor. ¡Esperamos que sean muchos años más de trabajo, porque sabemos que nuestro país lo necesita!