Emprendimientos diferentes en tiempos complejos
Cuando pensar más allá de los límites, usar la creatividad y empoderarse para lograr proyectos innovadores resulta en productos fuera de lo común…
Iniciar un negocio no es fácil y manejarlo tampoco… menos cuando —de la nada— te agarra una pandemia. Sin embargo, para algunos estos momentos difíciles han servido para reinventarse y salir adelante. Eso lo aprendieron estos emprendedores, quienes buscaron un nicho para destacarse a través de emprendimientos diferentes y únicos en Panamá.
Como otros luchadores, para quienes rendirse no es una opción, han logrado salir adelante con iniciativas que nacieron pequeñas y originales, aprendieron en el camino y han aprovechado las redes sociales para alcanzar sus mercados.
Mascotas consentidas

Valerie González (izq.) y Mónica García (der.) son las mentes creativas detrás de Fluff.
Mónica Garcia, de 25 años, y Valerie González, de 28, se echaron al agua a emprender con Fluff, que promueve la importancia del cuidado que necesitan y merecen los animales a través de productos artesanales fabricados especialmente para ellos.
Las emprendedoras son dos jóvenes que nos cuentan de su pasión: “Amamos inmensamente a los animales y a la naturaleza”, y enfatizan que las impulsó “el amor, el respeto y las ganas de aportar algo para mejorar la calidad de vida de nuestros amigos de cuatro patas”.
El emprendimiento surgió pensando siempre en ofrecer una opción natural, sana y segura para el cuidado de la piel y el pelo de los animales. Ellas elaboran todos los productos y, además, manejan la empresa, desde el empaque, la fotografía y el diseño, hasta el manejo de redes. “Nos complementamos y somos fieles creyentes del trabajo en equipo, el aprendizaje constante, los ideales y la proactividad”, cuentan.
Su emprendimiento lo conforman ellas dos y sus mascotas Gary, Figo, Boo y Bali, que también forman parte del equipo e inspiración para seguir innovando.
Para ellas, lo más difícil fue desarrollar la idea y hacerla realidad, ya que no contaban con conocimientos de negocios, “pero de eso se trata emprender… Somos constantes aprendices y nuestra marca nos ha ayudado a crecer tanto personal como profesionalmente”, nos cuentan.

Dog Balm y Doggy Splash son los productos artesanales insignia de Fluff.
Papel que se siembra
Angélica Urriola e Ingrid Molina, amigas desde hace 24 años y preocupadas por el medio ambiente, decidieron crear Eco Paper Papel Plantable, único emprendimiento femenino panameño que recicla papel de descarte proveniente de oficinas, casas o escuelas y le da una nueva vida. “Somos un papel 100% reciclado artesanalmente y plantable… en lugar de tirar este papel a la basura, una vez utilizado puedes plantarlo para cultivar tomates, pimentones, berenjenas, lechuga y más…”, cuenta Urriola.

Tarjeta de Eco Paper, hecha a base de material 100% reciclado.
Molina resalta que todo comenzó con la preocupación de dejarle un mundo mejor a su hija. Ambas se planteaban la pregunta de cómo se le podía dar uso útil a las toneladas de desechos de papel que se generan en Panamá cada año. “Nos tocó arrancar de cero, ya que no había suficiente información en internet que explicara cómo hacer que unas semillas sobrevivieran en un papel”, expresa.
Lo primero que hicieron fue inscribirse en el Canal de Empresarias de la Ciudad del Saber para recibir orientación y formalizar la idea de negocio. “Toda la capacitación fue muy productiva, obligándonos a agilizar la fase de experimentación y empezar a sacar productos”, informan.
Para el proceso de la confección del papel, se tritura el papel previamente remojado, se pone en una bañera amplia y con un bastidor se van sacando las hojas de una en una. Luego se colocan sobre las telas. “El resto del proceso es confidencial, ya que nos ha tomado un año perfeccionar nuestra técnica”, dicen.
Las semillas que utilizan son de hortalizas aclimatadas a Panamá. “Es decir, que solo utilizamos semillas de plantas comestibles”, comentan.
Lo más difícil para ellas ha sido saltar de la experimentación a la venta real de los productos, “porque teníamos la idea de que la experimentación era solo una fase, pero ahora sabemos que la experimentación es parte de nuestro proceso de crecimiento. Todo el tiempo estamos experimentando con texturas, semillas, colores y otros recursos naturales que favorezcan nuestro compromiso con la sostenibilidad”, finalizan contándonos con satisfacción.

Angélica Urriola de Eco Paper demuestra el proceso utilizado para hacer el papel, que además puede ser plantado.
¿Vino y helado?
Georgette Gaitán y Gabriel Duff se tiraron al agua esta cuarentena con Wine Ice Cream, un emprendimiento que consiste en la producción de helados de vino. La producción es 100% artesanal.

Gabriel Duff y Georgette Gaitán son una pareja emprendedora que, luego de un viaje a Argentina, se inspiraron para crear helados a base de vino.
La idea surgió a inicios del año pasado, pero no fue hasta esta cuarentena que tuvieron el tiempo de realizarla, ya que ambos trabajan y el tiempo les quedaba apretado. “Tuvimos la oportunidad de probar el helado de whisky en Argentina y pensamos que ¿por qué no hacer uno de vino, ya que existen muchas personas como nosotros también amantes del vino?”, nos contó esta pareja de novios.
Su primer sabor fue el Berry Merlot, y luego decidieron sacar el Cherry Rose, ya que muchas personas que son amantes del vino tinto también lo son del vino rosado; este es un sabor más dulce y menos fuerte. “Y dos meses después decidimos sacar el tercer sabor, Peach Chardonnay, una fusión entre el sabor seco del Chardonnay y lo dulce del melocotón, ambas hacen la mezcla perfecta en tu paladar”, aseguran. Para diciembre tienen planes de sacar dos sabores adicionales al mercado.
¿Cómo lo han hecho, en plena cuarentena? “No ha sido fácil la trayectoria, ya que además del factor económico que es de gran importancia no somos heladeros de profesión, esto ha sido ensayo y error en muchos ámbitos; pero hemos crecido, sacado nuevos sabores y conquistado muchos paladares en Panamá”, cuentan.

Wine Ice Cream cuenta con varios sabores de helados distintos y sus creadores esperan la salida de otros más para diciembre.
Iniciaron con una pequeña máquina casera, donde la cantidad de helados obtenida era mínima y les costaba sacar las ventas a tiempo, hasta que debido al volumen de clientes llegaron a su meta para la compra de una máquina más grande, rindiendo mejor en la producción.
Ellos aseguran que les ha ido bastante bien, ya que el producto ha tenido un buen impacto en la población al no tener competencia: “Es un helado nunca antes visto ni probado por muchos… y es la primera vez de algo así en nuestro país”.
Para finalizar, resaltan que su helado es solo para mayores de edad, ya que su ingrediente principal es el vino y contiene cierto nivel de alcohol.
Estas iniciativas, que no nos hubiésemos imaginado que se podrían realizar en los pasados meses, son prueba de que cuando se quiere, se puede, una filosofía común de quienes se salen de lo usual para alcanzar sus sueños y, de paso, suplir las necesidades o gustos de un público que disfruta de lo diferente.
“La experiencia que han ganado en trabajos anteriores o en hobbies pueden servirles para empezar un negocio. Investiguen ideas en otros países que no se estén haciendo en Panamá”. Angélica Urriola
“Cualquier idea o meta que aspiren, por muy pequeña que parezca, la logran si se esfuerzan y luchan por cumplirla. Siempre va a existir el miedo y la duda en la aceptación que tenga nuestra idea, incluso al momento de iniciar pueden recibir críticas negativas y constructivas, y siempre traten de tomarlas por el lado positivo, utilizándolas para mejorar”. Gabriel Duff
“Crean en ustedes, en lo que les gusta y en su idea, ya que esto es la base de todo. Sean pacientes y no se den por vencidos, pues siempre existirán las adversidades y desafíos, pero queda en nosotros mismos utilizar esto a nuestro favor para seguir creciendo y aprendiendo. Es importante saber aceptar críticas y consejos, siempre y cuando se den de manera positiva. Sean proactivos e innovadores”. Mónica García y Valerie González
Fotos: Cortesía de los entrevistados y Getty Images