Buscando nuestras raíces

Marti Ostrander de Carney |

15 marzo, 2019

Las pruebas de ADN aumentan en popularidad y cada vez más están al alcance de todos para temas genealógicos.

Cada vez son más personas las que quieren conocer sus raíces, de dónde vienen sus ancestros. Solo durante el año 2017, más personas se sometieron a una prueba de ADN para conocer su genealogía que todos los años anteriores combinados. Y al finalizar el 2018, más de 15 millones de personas en el mundo han analizado su ADN utilizando compañías populares como Ancestry.com y 23andMe.com, según la publicación MIT Technololgy Review (https://www.technologyreview.com/s/610233/2017-was-the-year-consumer-dna-testing-blew-up/). En comparación, tan solo 675,000 personas se hicieron este tipo de pruebas en el 2014. ¿Por qué la alta demanda? Quizás porque lo que uno aprende sobre sí mismo es muy interesante.

Nuestra herencia

Aunque las pruebas de ADN tienen múltiples usos –desde salud, paternidad o hasta encontrar criminales– la más popular a nivel comercial son los servicios de genealogía. Los resultados de estas prueban señalan de qué continente o región vienen sus ancestros y dependiendo de la empresa que utilice puede ponerlo en contacto con familiares cercanos y lejanos –hasta primos cuartos o quintos en muchos casos.

Valentín Solís, originario de Azuero, decidió comprar el kit de genealogía con AncestryDNA.com porque quería entender de dónde venía su familia desde sus orígenes. “Mis cuatro abuelos vienen de diferentes áreas: una de Perú, una local de Azuero y la otra mitad de mi padre era descendiente española del área de Las Tablas”.  ¡Y la sorpresa que se llevó cuando le llegó el resultado de su prueba!

Hace pocos años había conocido a una colega en Washington, D.C.,  donde reside actualmente. Al llegarle los resultados y agarrar un plan gratuito de 30 días, se dio cuenta de que esta colega ¡era su prima! Ahora, conjuntamente con ella intenta descifrar por qué lado son familia. Él ya tiene más de 100 conexiones en Ancestry.com. “Yo puse que quería ser localizado (hay una opción de privacidad donde nadie te contacta) y es bonito conversar con personas que son primas terceras o cuartas y descifrar de dónde somos parientes”, cuenta. Además, Solís confirmó lo que ya sospechaba: casi el 50% de su genética era española y el 25% de sus ancestros eran nativos, ya sea de la región centroamericana o de la región andina.

¿Cuál es el proceso?

El primer paso es pedir el kit. Hay diversas compañías que ofrecen el servicio y se puede pedir desde la computadora, por teléfono o comprarlo en algunos lugares en Estados Unidos. Las dos empresas más populares hoy día son AncestryDNA.com y 23andMe, y los precios varían dependiendo del tipo de prueba y de la empresa. La mayoría cuesta entre $79 y $199 dólares. Hay otras compañías en el mercado, pero estas dos tienen la mayor cantidad de personas registradas, que es importante si lo que busca son sus raíces y familiares.

De allí se toma el ADN. ¿Cómo se consigue? Dependiendo de la compañía que utilice, puede ser con un palito de algodón –raspándose la parte interna del cachete– o escupiendo saliva en un tubito. Los dos métodos generan los mismos resultados. Las dos más populares, Ancestry y 23andMe, utilizan saliva.

Una vez se toma el ADN, se devuelve el kit a la empresa. De allí, puede demorar entre seis y diez semanas para obtener los resultados –los recibe vía correo electrónico, que lo invita a ingresar a la página web con un código especial para que nadie más vea sus resultados.

Dependiendo de la empresa y la prueba, va a recibir la data cruda, los estimados de su etnicidad y sus familiares potenciales –estos últimos lo pueden contactar solo si así lo desea.

Lo que va a recibir en su etnicidad será una región de origen, no necesariamente un país. Esto es porque las líneas de los países han cambiado tanto a través de la humanidad, que prefieren ligarse a región –por ejemplo, la península Ibérica, en vez de España y/o Portugal. También es importante entender que cuantas más personas se hagan este tipo de pruebas, más datos son generados, lo que ayuda a ser más preciso a la hora de dar una región. Eso implica que los resultados de hoy quizás no sean 100% igual a los que tendrá en tres años –esos serán aún más focalizados. Y cada vez que la empresa mejore sus estimados de etnicidad, los suyos automáticamente serán actualizados –no hay que volver a tomar la prueba.

La mayoría de los sitios ofrece más servicios a un costo como, por ejemplo, por una cuota mensual o anual Ancestry.com ofrece la opción de crear su árbol genealógico, conversar con otros parientes que encuentre (esta opción depende de si usted y los demás deseen hacerlo). Con esa cuota también podrá ver los archivos importantes, ya sean certificados de nacimiento, de matrimonio, de defunción y récords de inmigración y emigración (léase viajes), ya que la mayoría se han digitalizado –incluyendo muchos de Panamá.  Valentín Solís, por ejemplo, encontró los certificados de bautismo de sus bisabuelos, originarios de la provincia de Veraguas.

Algunos sitios ofrecen ir más allá y analizar sus rasgos. Esto puede ayudarlo a entender su herencia –ya sea que comparta el color de ojos con las demás personas de su área de Irlanda o que sus a primos no les guste lo dulce. Este servicio es reciente –y una nueva forma de pensar sobre quién es. En AncestryDNA Traits se incluyen datos como el largo de los dedos, la sensibilidad al dulce y a lo amargo, el tipo de cabello, el color y su grueso, el grueso de las cejas y hasta la propensión a quedarse calvo.

También se compara con otras regiones. Por ejemplo, si una gran parte de su ADN se liga a Italia, puede salir que el 21% de los italianos tiene el cabello en rulos, 32% lo tiene lacio y 44% lo tiene ondulado. También se puede comparar con otros ADN ligados al suyo y cuánto tienen en común en sus rasgos.

En temas de salud, también puede indagar. Por ejemplo, 23andMe puede hacer un screening para los riesgos de enfermedades genéticas como el Parkinson o la fibrosis cística.

Riesgos

Todo tiene sus riesgos. Uno de los más preocupantes es que su ADN caiga en las manos equivocadas. Así, la mayoría de los sitios le da la opción de borrar su ADN del sistema. Y todos dicen tomar las mayores precauciones ante el tema.

También hay riesgos de que se entere que tiene hermanos o primos que no conocía y se han dado casos en donde las personas se han dado cuenta de que fueron concebidas de espermas donados o que fueron cambiados al nacer.

Querer saber

La tendencia parece indicar que la búsqueda de nuestras raíces continuará. Cada día más personas muestran interés por eso que desconocen, por averiguar de dónde vienen y por recabar pistas sobre quiénes les antecedieron. En un mundo en el que la tecnología y los avances médicos no cesan, más temprano que tarde podríamos contar con nuevas herramientas que revelen nuestro pasado.

¿Qué es el ADN?

El ADN, o ácido desoxirribonucleico, se encuentra en todas las células vivas. Es una larga cadena que le dice a las células cómo crecer y actuar y es el depositario de la información hereditaria. El ADN está dividido en cromosomas o bloques grandes que, a su vez, se dividen en genes. Los humanos tienen 23 pares de cromosomas (46 en total) en un doble hélix. Recibimos 23 cromosomas de nuestro padre y 23 de la madre.

Hay diferentes pruebas de ADN: autosómico, mitocondrial y de cromosoma Y. El más utilizado en pruebas de genealogía es la prueba autosómica, que no contribuye a su género, pero sí pueden ligarlo a familiares tan lejanos como primos cuartos. Como el ADN autosómico viene de todos sus ancestros, esta prueba es buena para encontrar un rango de sus ancestros y parientes. También puede proveer estimados razonables de la etnicidad de sus ancestros y de las regiones del mundo de donde vienen, tomando en cuenta que después de un par de generaciones no será fidedigno.

¿Dónde ir?

  • AncestryDNA.com: Un kit puede salir tan barato como $60. Más de 12 millones de personas están en su base de datos –es el más popular. Por ende, es el más recomendado si lo que busca es su genealogía. Estima los orígenes de las personas alrededor del mundo y posibles coincidencias de ADN con sus parientes. También se puede añadir la función de Rasgos, para conocer más sobre su personalidad. Incluye la opción de pagar 30 dólares al mes para continuar actualizando su árbol genealógico.
  • Family Tree DNA: Ofrece los tres tipos de pruebas de ADN, al igual que reportes más detallados. Adicionalmente, ofrece servicios para América Latina y poco a poco ha ido creando una base de datos de personas del área.
  • My Heritage DNA: Tiene 3.2 millones de perfiles –y destruye su ADN si así lo solicita. Dicen los expertos que es el más privado de todos.
  • 23andMe: Popular en Estados Unidos, con una base de más de 3 millones de personas. Es uno de los sitios populares que ofrece pruebas de salud relacionadas al ADN.
  • CRI Genetics: Poco conocido, pero de los más detallados, ya que su director es experto en el tema. Ofrecen cinco tipos de reportes y se puede dividir en línea materna y paterna.
  • Living DNA: Lo recomiendan para personas cuyos ancestros son del Reino Unido o de Irlanda.
  • Vitagene: Enfocado en el análisis para su salud, hace hasta menús de comida y de ejercicios basados en su ADN.
  • Orig3n: Usa tecnología ganadora de premios nobel, también enfocado a nutrición y fitness. Todos los resultados están encriptados.

 

Fotos: Getty Images

Quizás te puede interesar