Barcelona. Ciudad Viviente. Ciudad Múltiple.
Pocas son las ciudades que, a medida que las vamos conociendo, se muestran tan fieles a sí mismas y, sin embargo, tan cambiantes y multiformes como Barcelona. Ciudad múltiple, colorida, viva, que se transforma con la luz al paso de las horas y muda con las estaciones. Barcelona ha tenido, con el pasar de los tiempos, realidades históricas diversas que la han hecho única.
Destino turístico de primer orden, en Barcelona encontramos de todo. Su arquitectura, su diseño, su estilo y la vida que transita por sus urbanizadas calles, le dan un carácter especial que hace que quien la visite se quiera quedar y, quien ya la visitó, no la olvide jamás. Comencemos nuestro recorrido. Apenas se pisa en suelo barcelonés, se nota que hay un aire de arte y estilo en esta ciudad de 1,510,000 habitantes. El aeropuerto de Barcelona es la perfecta entrada a su ciudad y es por donde pasan más de 12 millones de personas cada año. Diseñado por Ricardo Bofill, este agradable aeropuerto fue concebido para ser más que una sala de espera, un trabajo arquitectónico digno de ser visitado, visto, caminado y recorrido.
Ubicándose…
Segunda ciudad más grande de España, en población y tamaño, Barcelona tiene una privilegiada posición en la costa noreste del Mediterráneo. El monte Montjuïc y el Tibidabo nos ofrecen un perfecto marco de orientación en la ciudad, pero el punto de referencia mayor es la avenida La Rambla, llamada popularmente Las Ramblas, y cuyas hileras de árboles que tanto la engalanan hoy día fueron sembradas, nada más y nada menos que en el siglo XVIII. Este espectacular paseo peatonal nos hace ver, oir y sentir el verdadero corazón de Barcelona. Plazas, terrazas, bares, hoteles y restaurantes, es aquí donde usted se debe dejar llevar por el colorido de la propia calle, sus puestos de venta de libros, flores, animales, sus artistas, sus museos, y toda la gente que va y viene sin preocuparse del tiempo. La atmósfera artística que la cubre es, sin duda, un paseo obligatorio durante el día o la noche.
Cuándo visitarla…
El verano le da el clima de fiesta que caracteriza esta ciudad, pero durante todo el año se siente el fervor de la gente. La manera más práctica de conocerla y sentir su pulso es caminando por sus calles para descubrir todo el encanto que hay en cada una de sus esquinas. Si lo prefiere, también puede utilizar el transporte público, que es muy fácil y accesible. Lo mejor que usted puede hacer es comprar un mapa de metro y de la ciudad, y aventurarse. Recuerde que Barcelona es una ciudad bien planificada. Es difícil perderse. Hay muchos puestos de información turística en todas las plazas principales. Le recomendamos conocer la ciudad con el Bus Turístico Barcelona. Con varios recorridos diarios y por 15 euros, este bus abierto lo puede llevar por la Barcelona Romana, mostrarle el Romántico y Gótico, el Modernismo en la ciudad y todo el recorrido Gaudí. Usted elige. Todas las rutas tienen 26 paradas guiadas, con la explicación en varios idiomas diferentes. La mayoría de estos buses salen desde la Plaza de Catalunya a partir de las 9 de la mañana. Se sorprenderá al escuchar el catalán en las calles, con la misma fluidez que escucha el castellano, ya que ambas son consideradas lenguas oficiales.
Noche y día…
La noche en Barcelona no tiene fin. Los últimos bares que han abierto y los de siempre, terrazas al aire libre, pistas de baile, música de todo tipo. Déjese llevar por el fervor de la ciudad y experimente de todo. Al sentarse en bares y restaurantes, pida las famosas tapas. La variedad lo dejará satisfecho antes de probarlas. Pero usted no está en Barcelona para hacer dieta, ¿no? Dicen los españoles que hay que saber combinar unas tapas con otras. Por ejemplo, de un lado gambitas y sepia y, en el otro, caracoles. No mezcle demasiado. Esto también va con la bebida: en un local no se debe pedir cerveza y vino en una misma ronda. Mejor pedir ronda de cerveza o ronda de vino. Ir de tapas tiene sus reglas.
Barcelona siempre está a la vanguardia de la música, la moda, estilo, diseño, arquitectura y la cultura. Encontrará coctelerías, champañerías, restaurantes, bares musicales, discotecas, tablaos flamencos, salas de baile, music halls, salas de fiestas, sex shows, karaoke, café teatro, cartelera de teatro y danza, multiespacios y carpas. Si le gusta la noche, éste es el lugar. Y si le gusta el día, ¡éste también es el lugar!
Su arquitectura…
Pasear por sus calles es descubrir un innumerable mundo de edificios y locales bellamente decorados con el rico modernismo que nos dio estilos y nuevos materiales como el vidrio, la madera, el hierro forjado y la cerámica. En la Plaza de Catalunya, urbanizada en 1927, podemos admirarnos con los preciosos edificios eclécticos medievalistas o modernistas.
No deje de visitar la Casa Milá o La Pedrera, una de las maravillas que Gaudí le dio a Barcelona. Restaurada y convertida en centro cultural y artístico, es un espacio dedicado al estudio de la obra de este espectacular arquitecto. Es realmente impresionante. Hay visitas guiadas y en el verano abre en las noches. Aquí se pueden apreciar los cinco elementos que componen la arquitectura de Gaudí: el empleo del arco catenárico, el hierro forjado, la carpintería y ebanistería, la geometría reglada y el trencadis, cuya técnica de mosaico formado con fragmentos de azulejos hace una composición generada por una descomposición.
Siguiendo con la arquitectura de Gaudí, visite Iglesia la Sagrada Familia. Este experimento estructural y fantasioso es un sitio que realmente nos muestra lo mejor de su imaginación intuitiva y constructiva. Su construcción se inició en 1882. Gaudí trabajó durante más de 40 años en esta gran obra, hasta su muerte, en 1926. Subir sus escaleras es una experiencia que usted debe sentir y vivir para entender la genialidad de esta obra. Es, sin lugar a dudas, una visita que llenará nuestras expectativas espirituales, conceptuales y estéticas.
El Parque Güell, patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es una de las obras más conocidas de Gaudí y una de las más bellas. Es una ciudad jardín que no llegó a realizarse como barrio residencial. Con un bello mirador sobre Barcelona, el aspecto de sus caminos sostienen fuertes muros de contención y robustas arcadas.
Otros sitios que no puede dejar de visitar son:
- La montaña de Montjuïc. Subirla, con el funicular, es un paseo divertido y diferente. Si tiene la suerte de estar durante un concierto o fiesta popular, es una experiencia que nunca olvidará.
- La zona deportiva, compuesta por el Estadi Olímpic y el Palau Sant Jordi. La celebración de los juegos olímpicos de 1992 creó nuevos espacios y construcciones, reordenando la ciudad y su historia. El Estadi Olímpic mantiene la fachada de 1929, pero su interior fue totalmente remodelado. Aquí también se encuentra la famosa Fundación Joan Miró, centro de estudios de arte contemporáneo, poseedora de un rico fondo artístico cedido por este importante pintor.
¿Cansado? ¡Ni se le ocurra! Barcelona es una ciudad que vive intensamente sus 24 horas. Ahora nos dirigimos a La Barceloneta, importante ejemplo de urbanismo barroco. Aquí podremos visitar el Museu d’História de Catalunya, museo temático que nos cuenta la historia del país desde los primeros habitantes hasta nuestros días. Además, encontraremos el Port Vell, una de las dos grandes instalaciones náuticas de que dispone la ciudad.
Barcelona. Ciudad despierta. Ciudad de arte, cultura y fiesta. Definitivamente, un destino imprescindible para quienes les gustan las ciudades cosmopolitas que nunca paran de funcionar.
La Rambla o Las Ramblas, paseo peatonal más famoso de Barcelona, está integrada por diversas avenidas o Ramblas, cada una con su particular estilo y características típicas:
- Rambla de Canaletes. Aquí puede ver la fuente Canaletes. Si tiene oportunidad de parar y escuchar las tertulias que se dan entre sus frecuentadores, tendrá una experiencia inolvidable.
- Rambla dels Estudis. Conocida popularmente por la Rambla dels Ocells (de los pájaros), debido a los gorriones que anidan en los árboles. Visite la Iglesia de Betlem, de estilo barroco (siglos XVII y XVIII), el Palau Moja, importante edificio del siglo XVIII con bellas pinturas murales de Francesc Pla, un reconocido escultor y pintor español que se dedicó a hacer vitrales para distintas instalaciones y edificios.
- Rambla de les Flors. Prepare sus ojos y su nariz. El colorido y el aroma de los puestos de las floristas harán que usted quiera comprar todas las flores. Por la calle de la Portaferrissa, encontrará un mundo comercial de tiendas con las mejores tendencias de la moda contemporánea. El Mercado de Sant Josep o la Boquería es el más tradicional y surtido de Barcelona, un multicolor mercado de frutas, vegetales, verduras y pescados. La manera de promocionar sus productos es un arte digno de ver y escuchar.
- Rambla del Centre o dels Caputxins. En su pavimento podemos apreciar el diseño del genio que proyectó Barcelona al mundo, Antoni Gaudí. Sin duda, el personaje más recordado y sentido en esta ciudad.
- El Pla del Teatre y la Rambla de Santa Mónica preceden la llegada de la Rambla al mar. Cerca, encontramos el Museo de Cera y el paseo se cierra con el gran Monumento a Colón, convertido en elemento identificador de la ciudad.
- Rambla del Mar. Pasarela móvil de madera que nos llevará hasta el Moll d’Espanya, con un maravilloso centro lúdico y comercial que alberga cines, el famoso Aquarium, restaurantes, cafés y todo para que su caminada por Las Ramblas termine de manera excelente.
Fotos: Silvia Grunhüt / Space 67